¿Qué es el Drenaje Linfático Manual? Seguramente muchos de vosotros habéis presentado inflamación en alguna parte de vuestro cuerpo alguna vez en vuestra vida, ya sea por un golpe, por un proceso infeccioso o porque os han realizado una intervención quirúrgica.
La inflamación se define como el enrojecimiento, hinchazón, calor, dolor y pérdida de funcionalidad de una área del cuerpo. Es una reacción de nuestro organismo y una respuesta del sistema inmune para protegernos de lesiones o enfermedades. Es posible que exista un gran hinchazón por la acumulación de líquido en los tejidos de nuestro cuerpo, y mayoritariamente ocurre en los tobillos, pies o manos, y es lo que denominamos edema.
Los edemas se definen como un signo que aparece en forma de hinchazón de los tejidos blandos debido a una acumulación de líquido en el espacio intersticial. Se produce por un desequilibrio entre las fuerzas que regulan la filtración y la reabsorción de líquido entre compartimentos, produciendo así la hinchazón en las manos, pies o extremidades enteras. Existe la posibilidad de que la inflamación venga acompañada por una acumulación de líquido rico en macromoléculas como las proteínas. En este caso, el edema es denominado linfedema, y se encuentra entre la linfa y el espacio intersticial. El sistema linfático es el encargado de drenar este líquido rico en proteínas, pero cuando hay un fallo en la filtración y la reabsorción, se debe buscar un mecanismo externo de drenaje, y este es el drenaje linfático manual (DLM).
En el blog de hoy os queremos introducir a la técnica del drenaje linfático manual, un tipo de tratamiento que realizamos en el centro de Fisiomoviment destinado a aquellas patologías que han producido un edema o un linfedema en alguna extremidad, ya sea en brazo o pierna, y que el propio cuerpo no es capaz de drenar con su propio sistema linfático. Os vamos a explicar qué consiste el drenaje linfático manual y el sistema linfático, las patologías que podemos tratar con esta técnica y cuáles son sus beneficios.
¿QUÉ ES EL DRENAJE LINFÁTICO MANUAL?
El drenaje linfático manual (DLM) se considera una técnica manual que se aplica en especialidades como la fisioterapia, la rehabilitación, el masaje terapéutico y en la estética con el objetivo de mejorar las funciones del sistema linfático a través de diferentes manipulaciones que promueven la evacuación de sustancias de desecho, estimulan la circulación del líquido intersticial, reducen la retención de líquidos, los edemas y grasas, activan las funciones de las células linfáticas y elevan el nivel inmunológico del organismo. Se trata de una técnica manual en la que se realizan diferentes manipulaciones que activan y facilitan la circulación linfática por estimulación del automatismo de los ganglios y vasos linfáticos, facilitando la eliminación del exceso de líquido intersticial en los diferentes tejidos del organismo. No solamente ayuda a drenar el líquido, sino que también drena las proteínas de los edemas linfáticos, y por ahora no es posible evacuarlas o drenarlas con otras técnicas instrumentales mecánicas o eléctricas.
Para ponernos en contexto, es importante saber qué es el sistema linfático y cómo funciona. Este sistema está compuesto por una red de vasos superficiales y profundos, finos y gruesos que se distribuyen por todo el cuerpo. Por él circula la linfa, que ayuda a eliminar el plasma sanguíneo sobrante de las células y tejidos, sustancias de desechos y grasas entre otras. El sistema linfático está compuesto por los vasos sanguíneos, diferentes órganos y por los ganglios linfáticos. Activando estos componentes, a través del drenaje linfático manual, ayudamos a mejorar la circulación linfática, sobre todo en aquellas patologías del sistema linfático e inmunológico.
Las funciones del sistema linfático son:
- Drenar y transportar moléculas grandes que por su tamaño y composición no pueden ser transportadas ni absorbidas por la circulación sanguínea.
- Mediante las células linfáticas, llamadas linfocitos, que son parte de los ganglios linfáticos, tienen la función de producir anticuerpos para combatir con agentes patógenos externos. Por lo tanto, activa las defensas y el sistema inmunológico del organismo.
- Recoger el líquido sobrante procedente de diferentes tejidos del cuerpo y devolverlo a la sangre. Este proceso es necesario para evitar que el exceso de líquido se acumule en los tejidos y se hinchen
Los ganglios linfáticos son unas pequeñas estructuras que forman parte del sistema linfático. Se localizan agrupados especialmente en la zona cervical o cuello, en la zona axilar, en la zona supraepitroclear, en la zona suprapúbica, en la zona inguinal y en los huecos poplíteos. Sus funciones son:
- Detectar y reconocer las bacterias, virus y otras sustancias extrañas para combatirlas, destruirlas y eliminarlas del organismo.
- Ayudan a proteger y mantener el equilibrio de los fluidos del organismo, filtrando y transportando linfa.
- Los vasos linfáticos llevan fluidos no filtrados con sustancias de deshecho a los ganglios linfáticos para que sean filtrados y por otro lado, otro tipo de vasos linfáticos sacan fluidos limpios al ser limpiados por los ganglios para incorporarlo a la sangre.
En el trabajo del drenaje linfático manual será importante la activación de los ganglios linfáticos para que sobre todo se consiga drenar el líquido acumulado en los vasos linfáticos que producen el edema en la extremidad.
Un dato importante sobre los ganglios linfáticos es que funcionan como un sistema de filtración biológica, cuando el organismo es invadido por agentes externos, pero también determinan si las células cancerosas han logrado extenderse a otras partes del cuerpo, ya que algunos tipos de cáncer se extienden por medio del sistema linfático, a través de los ganglios linfáticos.
¿EN QUÉ CONSISTE LA TÉCNICA DE DLM?
Tal y como hemos comentado con anterioridad, el drenaje linfático manual es una técnica que se utiliza para mejorar las funciones del sistema linfático a través de diferentes manipulaciones manuales que promueven la evacuación de sustancias de desecho, estimulan la circulación del líquido intersticial, facilitan la circulación linfática por estimulación de los ganglios y vasos linfáticos, facilitando la eliminación del exceso de líquido intersticial en los diferentes tejidos del organismo. Es importante saber que sus beneficios no son de larga duración, por eso en ocasiones, es necesario realizar un tratamiento de manera sistemática y dosificada.
Cuando el paciente presenta un edema o linfedema, se debe realizar un tratamiento de “fisioterapia descongestiva compleja”, es decir, para obtener resultados a parte del drenaje linfático, vamos a incluir otros aspectos como:
- La presoterapia, que ayudará a evacuar solamente la parte líquida y no la proteína).
- Vendajes multicapas, para aumentar la duración de los beneficios del drenaje linfático manual.
- Curas de la piel
- Contenciones personalizadas, una vez el edema esté estabilizado.
- Ejercicio físico.
- Prevención.
- Nutrición.
- Terapia psicológica.
Cuando el paciente acude a la consulta se realizará una evaluación y diagnóstico de fisioterapia, donde se incluirá:
- Una anamnesis anotando la sintomatología.
- Se establecerán unos objetivos terapéuticos.
- Se realizará una exploración, teniendo en cuenta la consistencia del edema, el volumen que tiene y el estado de la piel
- Se realizará una perimetría: una medición del perímetro de ambas extremidades.
En el tratamiento se establecen dos fases:
- Primera fase: es una fase inicial donde se realiza un vaciado intensivo, con una duración de 3 a 4 semanas con una frecuencia diaria o de días alternos. Se realiza el drenaje manual y se aplica un vendaje multicapas 24h para mantener el trabajo realizado.
- Segunda fase: es una fase de mantenimiento una vez se ha estabilizado el edema. La frecuencia es gradual según la evolución del paciente. Se realiza el drenaje manual y si se requiere, se realizará una contención personalizada.
La propia técnica de drenaje linfático manual, se debe realizar con gran precisión, de manera lenta, suave y sin producir dolor al paciente, para no aumentar el daño a los vasos linfáticos afectados o agravar la patología linfática. Se realizan dos maniobras principalmente, una llamada “maniobra de evacuación”, donde se drena la masa líquida y las proteínas que están dentro del conducto linfático, y una “maniobra de introducción” donde se introduce la masa líquida y las proteínas del espacio intersticial hacia el conducto linfático, para posteriormente realizar una evacuación con la primera maniobra. Se estimulan siempre los ganglios linfáticos más próximos para ayudar al drenaje.
PATOLOGÍAS QUE TRATAMOS
Las patologías que tratamos o las indicaciones para realizar el drenaje linfático manual son:
- Patologías de origen linfático y venoso como el edema, linfedema, linfangitis, lipedema, fleboedemas
- Adenectomía inguinal, histerectomía o prostatectomía.
- Cirugía oncológica intraabdominal.
- Mastectomía.
- Edemas del embarazo.
- Edemas premenstruales.
- Distrofia simpático-refleja (Sudeck).
- Estética y procesos inflamatorios no infecciosos.
- Edemas postquirúrgicos.
- Edemas postraumáticos.
- Edemas de origen reumático.
Existen algunas contraindicaciones par la realización de esta técnica, como son:
- Infecciones agudas.
- Insuficiencia cardíaca descompensada.
- Trombosis venosa profunda.
- Tumores malignos no tratados.
- Afecciones de la piel.
- Hipertiroidismo.
- Síndrome del seno carotídeo.
BENEFICIOS DEL DRENAJE LINFÁTICO MANUAL
Los objetivos y beneficios que se buscan tras la realización de varias sesiones de drenaje linfático manual son las siguientes:
- Aumentar la función del retorno venoso.
- Reducir o eliminar los edemas.
- Aumentar la velocidad de la circulación linfática y del retorno venoso.
- Fortalecer y regenerar el sistema linfático, al mejorar la circulación de la linfa.
- Elevar el sistema defensivo inmunológico.
- Facilitar la relajación neuromuscular y mental, por su efecto neurosedante y relajante sobre el sistema nervioso vegetativo.
- Inhibir los estímulos dolorosos con una mayor respuesta para aliviar el dolor, por su efecto analgésico y sedante.
- Disminuir los procesos inflamatorios.
- Ayudar a reducir la retención de líquidos, hinchazón en pies, manos y extremidades.
- Depurar el organismo al eliminar las toxinas y sustancias de deshecho.
CONSEJOS Y RECOMENDACIONES PARA EL PACIENTE
Cuando alguien presenta un edema o linfedema, el mismo paciente debe ser parte activa del tratamiento, por eso algunos consejos que les damos son los siguientes:
- Mover la extremidad afectada para no desencadenar una atrofia muscular.
- Realizar actividad física moderada.
- No permanecer cerca de focos de calor como estufas o radiadores.
- No realizar exposiciones prolongadas al sol.
- Evitar llevar relojes, anillos, pulseras o ropa ajustada en la extremidad afectada.
- Utilizar un buen calzado
- Tener una buena higiene,hidratación y nutrición de la piel.
- Mantener la extremidad en elevación.
- Evitar el sobrepeso.
- Mantener una buena alimentación.
- En caso de infección, que realice una visita médica.
CONCLUSIONES
En el blog de hoy hemos aprendido y analizado más a fondo una técnica fisioterapéutica específica aplicada en un tipo de patología como es el edema o linfedema. Existen muchos tipos de inflamación, y nuestro propio cuerpo tiene mecanismos naturales para ayudar a reabsorber el líquido que provoca esta inflamación, pero muchas veces por problemas de filtración y reabsorción debido a patologías que generan un gran edema o linfedema, nuestro organismo no es capaz de drenar y se produce así un cúmulo de líquido que puede venir acompañado de proteína (en el caso del linfedema) ubicado sobre todo en las extremidades, y debemos ayudar a drenarlo mediante la técnica de drenaje linfático manual.
Se trata de una técnica manual que activa el sistema linfático a través de diferentes manipulaciones que promueven la evacuación de sustancias de desecho, estimulan la circulación del líquido intersticial, facilitan la circulación linfática por estimulación de los ganglios y vasos linfáticos, facilitando la eliminación del exceso de líquido intersticial en los diferentes tejidos del organismo. A través de la activación y estimulación de los ganglios linfáticos y las maniobras de “evacuación” y de “introducción” en los vasos linfáticos, conseguimos drenar el cúmulo de líquido de la extremidad afectada.
A parte del drenaje linfático manual, hay ciertos aspectos que también se deben tener en cuenta para el tratamiento de los edemas y linfedemos, como son la presoterapia, los vendajes multicapas, las curas de piel, el ejercicio físico y la nutrición entre otros. También es importante seguir los consejos y recomendaciones que os hemos dado para obtener todos los beneficios que nos aportará el drenaje linfático manual.
Si vuestro médico os aconseja realizar este tipo de tratamiento, es importante acudir a un fisioterapeuta que esté especializado y reciclado en este tipo de técnica tan específica. En Fisiomoviment queremos acompañar y tratar a todas aquellas personas que precisen de su tratamiento con profesionales cualificados para ella. Por eso, no dudéis en contactar con nosotros, os informaremos y ayudaremos.